¿PlayStation puede vencer a Xbox Game Pass?

¿PlayStation puede vencer a Xbox Game Pass?

El creador de la saga God of War, David Jaffe, ha revelado en su canal personal de YouTube que ha hablado con fuentes internas dentro de Sony, que le aseguran que PlayStation podría estar planeando alguna clase de respuesta al creciente éxito del servicio por suscripción Xbox Game Pass de Microsoft, esto de acuerdo a un articulo de Vandal.

“Lo que les puedo decir es que están haciendo algunas cosas porque conozco a gente en Sony que me ha contado que las están haciendo. Habrá una respuesta a Xbox Game Pass”, comenta Jaffe luego de opinar sobre las criticas que ha recibido el jefe de PlayStation, Jim Ryan, por parte de la comunidad de jugadores, a lo que agrego: “Ya he dicho varias veces que la gente que esta escribiendo el obituario de Jim Ryan se está adelantando demasiado”.

Esta noticia, que de momento no deja de ser rumor, abre la puerta a una simple pregunta: ¿puede realmente responder Sony al creciente éxito del Xbox Game Pass? Ya en septiembre fue el propio Jim Ryan quien señalo que el servicio de suscripción de Microsoft es “insostenible”, ya que el modelo de negocio de PlayStation, que apuesta fuerte a los grandes juegos exclusivos, con presupuestos que superan fácilmente los 100 millones de dólares, no podría funcionar con un Xbox Game Pass.

Y es que aquí entra de lleno la principal diferencia entre Microsoft y Sony. Microsoft es una de las 5 empresas mas poderosas del mundo, logrando en 2020 unos ingresos totales de aproximadamente 143.000 millones de dólares, con 44.200 millones de dólares en beneficios. Para Microsoft, Xbox no es sino una parte mas de un gigantesco negocio que incluye muchos otros productos iguales o más rentables, como Windows 10, la suscripción de Office, Azure y demás servicios en la nube, y la atención y servicios a otras empresas y gobiernos.

Sony todavía no ha presentado formalmente sus ganancias del 2020, pero para darnos una idea, en 2019 sus ingresos superaron los 76.000 millones de dólares, 1.200 millones de dólares menos que en 2018, a los que el 23% de este total pertenece a los servicios de redes y juego, muy por encima de otras áreas de Sony como películas (12%), música (10%) o productos y soluciones electrónicas (4.5%). De estos, solo 5.400 millones de dólares fueron exclusivamente beneficios.

Esto se traduce en que Sony es un gigante de pies de barro, una enorme empresa de electrónica que no destaca en sus televisores (donde Samsung, Panasonic o LG brillan más), sus smartphones (opacado por Apple, Samsung o Xiaomi), sus laptops (división que vendieron hace años) o sus películas (donde compite con monstruos como Disney o Warner). De hecho, la división de PlayStation es la que lidera las ganancias de la compañía, sino es que directamente evitan que esta entre en una crisis, al grado que PlayStation es el único producto que podríamos decir que es un éxito rotundo para la empresa.

Toda esta montaña de cifras se traduce en una simple realidad: Microsoft tiene mucho mas dinero que Sony para invertir a largo plazo. Microsoft ha podido comprar a lo largo de los años hasta 23 estudios internos de desarrollo de videojuegos, cada uno trabajando en títulos de alto presupuesto al nivel de Gears of Wars, Halo o Forza Motorsport, o a menor escala como Grounded, y que tarde o temprano darán una gran cantidad de juegos exclusivos para Xbox. Al mismo tiempo, ha podido aliarse con empresas como EA, Square Enix o Sega para incluir juegos de estas empresas al catalogo de Game Pass, al tiempo que negocia constantemente con muchas otras empresas más, desde RockStar hasta indies, para incluir juegos al servicio todos los meses.

Y todo esto sin lograr, al menos de momento, asegurar que Xbox Game Pass sea un servicio rentable, ya que Microsoft tiene el poder financiero para crear un plan a largo plazo que asegura que en 5 o 10 años, Xbox Game Pass tendrá un catalogo envidiable de juegos, tanto grandes juegos First Party, hasta una gran variedad de Indies.

Sony, por el contrario, aunque debe saber que el Game Pass de Xbox es una ventaja que los esta matando poco a poco, simplemente no tiene como competir al mismo nivel. Solo con la reciente compra de Bethesda, Microsoft gasto 7.500 millones de dólares, mas de lo que Sony al completo obtuvo como ganancias en 2019. PlayStation ha centrado sus esfuerzos en grandes juegos exclusivos como The Last of Us Part II o Ghost of Tsushima, o en contenido exclusivo como Final Fantasy VII Remake o modos de juegos de Call of Duty, no solo porque tengan una visión conservadora de la industria del videojuego, sino porque probablemente hasta ahí se pueden dar el lujo de responder.

Y esto es solo si nos limitamos al Game Pass. Tarde o temprano, los 23 estudios internos de Xbox empezarán a lanzar una lluvia constante de videojuegos exclusivos, que tendrán igual o mas calidad que los de Sony, con una mayor variedad de propuestas. ¿Cómo actuara Sony si su estrategia de grandes exclusivos apenas da para 2 o 3 juegos un mismo año?

Con esto no digo que no tengan como contraatacar, ya que PlayStation Now (que es una mezcla de Game Pass con xCloud de Xbox) o los juegos mensuales de PlayStation Plus, podrían servir como una buena base para crear alguna respuesta exclusiva para PlayStation 5 en contra del Xbox Game Pass.

Lo que si significa es que Sony ha entrado en años recientes en una guerra de desgaste, una en la que partió con ventaja por poseer la marca PlayStation, una de las mas famosas y reconocidas de la industria del videojuego, y por lograr que PS4 fuese la consola mas vendida de su generación (gracias en parte al horrible primer anuncio de Xbox One), pero que a largo plazo tiene muy difícil el siquiera competir al mismo nivel que Microsoft, que es una empresa tan grande y rica, que sin necesidad de concentrarse solo en la industria del videojuego, tiene recursos de sobra para crear un catalogo de exclusivos y alianzas con empresas third party e Indies que puede aplastar a PlayStation.

Un hipotético PlayStation Game Pass necesitara una enorme inversión en tecnología para competir con el juego en la nube y la retrocompatibilidad de Xbox, dinero para tener un catálogo exclusivo tan grande y variado como el Game Pass potencialmente tendrá en unos años, y capacidad de atraer a empresas third party para que juegos de otras empresas alimenten el catálogo. Y la realidad es que Sony pareciera que no tiene como competir en igualdad de condiciones en estas tres áreas.

Enlaces Recomendados