Star Wars Rebels: 7 años después
Con el reciente estreno de Star Wars The Bad Batch, que vino luego de otras grandes series como The Mandalorian, o la séptima temporada de The Clone Wars, podemos decir que la nueva era de Star Wars bajo el control de Disney nos ha dado una gran cantidad de contenido de muy buena calidad para los fans (a excepción de The Rise of Skywalker), por lo que me anime a volver a ver la serie que comenzó esta nueva era para la saga hace casi 7 años, una que en su momento tuvo todo en contra, y que le tomo tiempo agarrar el ritmo por el que sería querido por los fans: Star Wars Rebels.
Hace mucho tiempo en una galaxia muy lejana…
Cuando Disney compro Lucasfilm en 2012, fueron muchos los fans que temieron por el futuro de la franquicia, más cuando los dos primeros actos de la casa de Mickey Mouse fue reiniciar el Universo Extendido original de Star Wars, y cancelar Star Wars: The Clone Wars cuando había producido la mitad de su sexta temporada.
Cuando finalmente descubrimos que la siguiente gran serie de la saga sería una Star Wars Rebels ubicada en la época del Imperio Galáctico, pocos años antes de la película de Star Wars Episodio IV: Una Nueva Esperanza, y que nos narraría la vida y obra de un pequeño equipo de rebeldes a bordo de la nave “Fantasma” (o “Espíritu” en España) en sus luchas para liberar al planeta Lothal de la ocupación Imperial, no fueron pocas las personas que pusieron en duda la calidad de la serie.
Y es que Star Wars Rebels se estrenó en un momento particularmente malo, ya que las comparaciones con su antecesora la destrozaron en un comienzo ante los fans.
The Clone Wars puede que haya tenido un tono más infantil y una calidad cuestionable en sus primeras temporadas, pero al momento de concluir su quinta temporada, la serie había alcanzado un in crescendo sorprendente, teniendo un tono cada vez más oscuro que nos recordaba constantemente como la serie, con cada episodio, se iba acercando cada vez más a Star Wars Episodio III: La Venganza de los Sith, con una República cada vez más imperializada, un Palpatine cada vez más poderoso, y una Orden Jedi ignorante de la catástrofe que se formaba a su alrededor en una guerra que solo empeoraba con cada día que duraba.
Los fanáticos más acérrimos de Star Wars en ese tiempo, entre los que me incluyo, esperábamos más de la Guerra de los Clones, más de los Jedi luchando en una guerra de mentira y una Republica cada vez más corrupta, con unas historias cada vez más serias y oscuras, y esperábamos con ansias el momento en que finalmente conectara con La Venganza de los Sith (algo que finalmente sucedería casi 7 años después en su séptima temporada). Su repentina cancelación y reemplazo por una serie para Disney XD, con todos los temores que eso implicaba sobre un tono más infantil, hicieron que muchos juzgáramos más duro de lo que posiblemente se debió en su momento a Star Wars Rebels.
Fue por esto que, cuando finalmente vimos por primera vez la primera temporada de Star Wars Rebels, muchos nos sentimos decepcionados, ya que era regresar al punto de partida que tuvo The Clone Wars: una historia más sencilla e infantil de lo que sería en su conclusión.
Pero ahora que podemos ver la serie en perspectiva, este comienzo que se percibió decepcionante en su momento, ahora se puede percibir como un enorme paso adelante por parte del equipo de animación de Lucasfilm.
Puede que The Clone Wars yo lo haya disfrutado por su tono bélico y político, pero al ser una antología de historias de la Guerra de los Clones, no había un hilo conductor que uniera todos los episodios de cada temporada, sino que era una serie de historias sueltas contando distintos momentos de la guerra de los clones, que ni siquiera estaban contados en orden cronológico, sino que eran distintos eventos en un orden que se percibía al azar, pudiendo narrarse una batalla en una temporada, narrarse la historia precuela a dicha batalla en la siguiente, y la secuela de esa batalla en la siguiente temporada.
La situación mejoro un poco con las siguientes temporadas, al tener arcos argumentales narrados en varios episodios, varios de ellos muy buenos (como el de Ahsoka siendo acusada de traición o el arco de Mortis) pero el problema base seguía ahí. Peor aún, al contar con tantos personajes importantes de las películas, como Anakin Skywalker, Obi-Wan Kenobi o Yoda, por mencionar algunos, no se podía desarrollar apropiadamente, ya que no importa que contara la serie, estos personajes debían llegar a un punto concreto al conectar la serie con La Venganza de los Sith. No en vano Ahsoka o el Comandante Rex se volvieron de los personajes favoritos de los fans, ya que al ser nuevos en la saga, y no salir en las películas, son los que realmente demuestran un desarrollo y evolución a lo largo de las temporadas.
Star Wars Rebels aprendió de estos errores, y busco contarnos una historia de un grupo concreto de héroes, con personajes que eran completamente nuevos en la saga y que, a excepción de las conexiones con personajes y momentos de la trilogía original de Star Wars, tenía una historia completamente nueva, lo que le permitió al equipo de Lucasfilm darles un completo desarrollo a sus personajes que, pese a las impresiones iniciales, permitió que termináramos enamorándonos de ellos.
Toda la primera temporada de Star Wars Rebels se dedica a presentarnos a la tripulación del fantasma, la segunda a mostrarnos el nacimiento de la Alianza Rebelde y a profundizar en la mística de la Fuerza, la tercera a mostrarnos el desarrollo de Ezra Bridger como usuario de la Fuerza y el contraataque del Imperio liderado por el Gran Almirante Thrawn, y la cuarta a darle un épico final a todo lo presentado hasta ese entonces.
Este desarrollo más tradicional para una serie de televisión, aunque implico un comienzo lento en un inicio, permitió sentar las bases para una historia que sabría como captar nuestra atención, logrando con los episodios iniciales y finales de cada temporada dejar una expectativa tan elevada, que siempre estábamos pendientes por saber más, pese a algún que algún que otro episodio en el medio que no supiera mantener el nivel.
De paso, nos brindó con personajes que se volvieron memorables para los fans de Star Wars. El primero y más destacable es Ezra Bridger, el joven usuario de la Fuerza que empieza su entrenamiento de Jedi cuando se encuentra con Kanan Jarrus. Aunque en un inicio es el típico chico de serie animada, de dárselas de listo, lanzarle chistes a todo el mundo y meterse en problemas a cada paso que da, vemos como poco a poco su personalidad evoluciona, primero aceptando a la tripulación del Fantasma como su nueva familia, luego sus tanteos con el lado oscuro, hasta que vemos como madura hasta convertirse en alguien digno de ser un Jedí.
A él le sigue su maestro, Kanan Jarrus, un personaje que destaca por no ser un maestro tradicional como lo fue Obi-Wan Kenobi o Yoda, sino porque al haberse ejecutado la Orden 66 él todavía era un padawan, por lo que es mucho lo que realmente le falta por aprender, siendo en muchas ocasiones evidente que no sabe cómo educar a Ezra. Es fascinante ver como la relación entre Kanan y Ezra no es la de un sabio a su pupilo, sino la de alguien que sabe solo un poco mas que su aprendiz, y que en el camino los dos van aprendiendo el uno del otro, hasta volverse unos verdaderos Jedí.
Junto a Kanan tenemos a Hera Syndulla, la capitana del Fantasma y la verdadera líder del equipo. Su importancia es tal en la serie, que es ella la que en muchas ocasiones le da consejos a Kanan sobre cómo educar a Ezra, o quien demuestra una resiliencia, madurez y liderazgo, que la hacen la base sobre la que el resto del equipo se puede apoyar. Especialmente disfruté el cómo es evidente la relación de ella con Kanan, como poco a poco se hace más y más evidente a lo largo de las temporadas, hasta que finalmente confiesan su amor en los últimos episodios, ya que simboliza como Kanan no cometió los mismos errores de la antigua Orden Jedí. Es además el enlace del grupo con la Alianza Rebelde, y su importancia es tal que termina volviéndose una líder con un papel destacable en la guerra contra el Imperio, saliendo en videojuegos como Star Wars: Squadron, y habiendo rumores de su futura participación en series live-action de Star Wars.
A ella le sigue Sabine Wren, una mandaloriana que se volvió de mis personajes favoritos de Star Wars Rebels. Siempre me gusto como pese a ser tan hábil en el combate como el resto de mandalorianos que ya nos había mostrado The Clon Wars, ella destacaba por ser una chica lista y experta en explosivos, pero que al mismo tiempo tenía un sentido artístico tan grande, que la alejo de los típicos tonos grises que dominan al resto de mandalorianos. Es además el personaje que nos brindó algunas de las mejores historias de la serie, como lo es el momento en que Kanan la entrena para usar el sable de luz oscuro, y la que tiene las historias que sentarían las bases para lo que luego The Mandalorian desarrollaría sobre que sucedió con los mandalorianos tras esta serie. Especialmente disfrute como no la convirtieron en un simple interés amoroso de Ezra, sino más bien en una amistad y confianza mutua que va creciendo a lo largo de los capítulos.
Como ultimo miembro del equipo tenemos a Garazeb “Zeb” Orrelios, un lasat que actúa como el hermano mayor del equipo. Personalmente lo sentí como el miembro menos interesante de todo el grupo, mas que nada al compararlo a la historia personal y personalidad del resto del grupo. Su historia como el superviviente de una raza que fue atacada por el Imperio y forzada a abandonar su mundo de origen, termina siendo interesante, pero realmente es el personaje que menos se desarrolla, y cuya historia menos implicaciones tiene para la trama general.
Finalmente no puedo terminar de hablar de la tripulación del Fantasma sin hablar de Chopper, el robot astromecánico de la serie que brillo por la personalidad alocada que mostraba en Star Wars Rebels, y que yo especialmente recuerdo porque el canal oficial de Star Wars en YouTube, ya que en su serie donde hablaba de secretos de la serie luego del estreno semanal de cada episodio en Disney XD, tenían un robot a control remoto a escala real de Chopper con el que se ponían a hacer bromas en cada video, y que probablemente es el mismo que usaron para su muy breve cameo en Rogue One.
Pero la serie no se limitó a desarrollar buenos personajes, sino que conto una historia que termino agregando elementos muy importantes al canon de Star Wars.
Star Wars Rebels nos mostró como fueron los años previos a la Guerra Civil Galáctica de la trilogía original, con una Alianza Rebelde apenas en formación, con pequeñas células rebeldes operando por separado, un Imperio que todavía dominaba con puño de hierro a la Galaxia, y con muchas referencias a la trilogía original y de precuela de Star Wars.
Personajes como Lando Calrissian, el Senador Bail Organa, Mon Mothma, la princesa Leia Organa, el Gran Moff Tarkin o Darth Vader tienen sus apariciones, brindándonos algunos de los mejores momentos de la serie. Pero quien más destaco fue el Gran Almirante Thrawn, no solo porque fue un personaje del Universo Expandido anterior a Disney rescatado por Dave Filoni, creador de esta serie y The Clone Wars, para el nuevo canon de la era Disney, sino por ser un personaje que, al igual que en su encarnación original, era un hombre brillante que usaba el arte para comprender la forma de pensar de sus enemigos, para así predecir sus movimientos y poder vencerlos en batalla, funcionándole a tal grado en la serie que, cuando pierde, sucede por la incompetencia de los demás imperiales, o porque no comprende a la Fuerza, y que logro por merito propio, volverse en uno de los grandes villanos de Star Wars Rebels.
Eso sí, viendo en retrospectiva, lo único que no me gusta es que la versión de Star Wars Rebels de Thrawn termino siendo ligeramente más malvado de lo que es en los libros publicados por Timothy Zahn, creador del personaje, en los libros del nuevo canon de Disney, evidenciando que las intenciones para el personaje en los libros del canon actual de Star Wars no eran necesariamente las mismas que las intenciones del equipo detrás de Star Wars Rebels.
Pero donde más brillo la serie fue en la forma en que nos presentó a la Fuerza, dándole una importancia y un desarrollo que no tuvo The Clone Wars, que estuvo más centrada en la guerra y el conflicto político, mostrándonos el crecimiento de Kanan y Ezra como Jedi, así como aspectos nunca vistos de la Fuerza.
Pero lo que más recordare de esta serie en este apartado es la introducción del “mundo entre mundos”, una dimensión de la Fuerza separada de nuestra realidad, y donde el concepto lineal del tiempo y el espacio pierde su significado, que le permite a quien ahí entre manipular la realidad a niveles nunca antes vistos, y que nos dio uno de los giros argumentales que más nos sorprendieron en su momento.
En conclusión
Star Wars Rebels es una serie que, viéndolo en retrospectiva, termino siendo mucho mejor de lo que muchos de nosotros pensábamos en el momento de su estreno, una que, aunque tenía una ambientación que no supera a la de The Clone Wars, supo narrarnos una historia que aprendió de todos los errores que tuvo en su día la serie sobre la Guerra de los Clones, contándonos una trama con unos personajes que se ganaron el cariño de los fans, y que terminaron teniendo una de las mejores historias que hemos visto hasta ahora en la saga, al grado que aspectos fundamentales de la trama de The Mandalorian, o la futura serie live-action de Ahsoka en Disney Plus, son gracias a esta serie.
Si en su momento tuviste dudas de Star Wars Rebels, o quieres descubrir donde Lucasfilm empezó a adquirir la experiencia que le permite crear tan buenas series animadas de la saga en la actualidad, como lo es la actual serie de The Bad Batch, actualmente puedes verlo completo en Disney Plus.
Licenciado de Estudios Liberales de la Universidad Metropolitana de Venezuela. Me especializo en blogging, SEO y Analítica Web, además de ser un gran fanático de los videojuegos, el cine, el anime y los cómics.