The Mandalorian y la Darksaber, o como LucasFilm si sabe contar historias
El final de temporada de The Mandalorian, la primera serie Live-Action del universo Star Wars, ha sido, junto al videojuego Star Wars Jedi Fallen Order y especialmente, la película final de la actual trilogía, Star Wars: The Rise of Skywalker, los grandes eventos del año que todos los fanáticos de la saga creada por George Lucas hemos podido disfrutar. Pero si por algo ha destacado The Mandalorian por encima de la trilogia de peliculas que concluyó este mes de diciembre ha sido por dos hechos fundamentales: un excelente uso del canon de Star Wars y una historia mejor contada.
Advierto que, aunque no me propongo a contar al detalle su historia, hay spoilers de The Mandalorian, por lo que están advertidos.
Fiel al canon de Star Wars
Una de las grandes críticas que le he dado varias veces a la trilogía de Star Wars compuesta por The Force Awakens, The Last Jedi y The Rise of Skywalker ha sido la falta de planificacion, una que ha causado que aunque las película contienen una propuesta y personajes con mucho potencial, se sienta que cada una quiera contar su propia historia, sin un claro hilo en común. Esto causa que sea difícil para el público ver de forma clara cuál es la gran historia de esta trilogía, o lo que es peor, cual es el objetivo de sus personajes, poder ver un buen desarrollo de estos a lo largo de las cintas, o siquiera no sentir que los actos de unos en una cinta no contradicen a los de otra cinta (te veo a ti Kylo Ren y tu » Deja que el pasado muera»).
En esto es lo primero que destaca The Mandalorian. Aquí si tenemos claro cuál es su historia y objetivo: La historia de un cazarrecompensas que solo conocemos como «el Mandaloriano», quien tiene una dura vida 5 años después de la caída del Imperio, en una galaxia que está bajo una falta de orden y ley; un día recibe una misión para capturar a un objetivo de 50 años para entregárselo a unos remanentes Imperiales, resultando ser el mismo un bebé de la misma raza del Maestro Yoda, lo que le lleva a tener una crisis de conciencia, a negarse a entregarlo y quedarselo para protegerlo de los horrores que le haría el Imperio.
Este es el leitmotiv que guía toda la historia de The Mandalorian, un eje central claro que le permite a la historia desarrollar de forma clara la historia del personaje, incluso en los capítulos que son mas de relleno, y que sirve de un excelente punto de partida para el futuro de la serie. En cambio, la trilogía de películas tiene un pésimo desarrollo, ya que una parte te quiere contar una clásica historia del bien contra el mal, mientras otra te quiere contar una historia que busca sorprendernos con una historia llena de grises alejada de los clichés de la saga. Una confusion de ideas y falta de dirección que terminan perjudicando la trama general de las tres películas principales de la saga, y que como se señalo en nuestro analisis de The Rise of Skywalker, redujo la que debió ser un final espectacular en solo una película buena (o apenas aceptable, si eres mas estricto).
Pero lo que es mas importante, esta buena planeación de The Mandalorian permite hacer un uso magnífico de todo el canon de Star Wars. No solo porque al ser una serie tiene mas tiempo para desarrollar ideas que en las películas apenas se pueden mencionar, sino porque se siente que, mas alla de complacer a los fans, se hace con el propósito real de enriquecer mas la historia de de la saga.
Tenemos por ejemplo la imagen de una galaxia caótica y sin ley a causa de la caída del orden del Imperio Galáctico y la ineficacia del gobierno de la Nueva República presentada en varios libros y cómics de Star Wars, la imagen de los remanentes del Imperio, que aunque derrotados tras la destrucción de la segunda Estrella de la Muerte todavia siguen existiendo, todavia son una amenaza y potencialmente son la base de la futura Primera Orden, o lo que es mas importante, que finalmente sabemos que sucedió con los Mandalorianos tras el comienzo de su rebelión contra el Imperio que pudimos ver en Star Wars: Rebels.
Y es precisamente de esta serie animada de la que tenemos que hablar ahora, dado como terminó el último episodio de la temporada de The Mandalorian. Gracias a esta serie sabemos ahora que dicha rebelión terminó con la derrota total de los mandalorianos y la destrucción de su planeta natal, Mandalore, siendo devastado su cultura por el Imperio, y que los sobrevivientes se han esparcido por la galaxia, escondidos para preservar lo poco que sobrevivió a la Purga.
Aquí es donde entra el personaje de Moff Gideon, quien en sus breves apariciones en la primera temporada, se ha perfilado como el gran villano a vencer por el Mandaloriano. No solo por ser quien quiere al popularmente llamado como «Bebé Yoda», sino porque como miembro de la Oficina de Seguridad Imperial de Mandalore, tuvo un papel destacado en la destrucción de los mandalorianos, y de alguna forma terminó siendo el dueño de la espada de luz conocida como Darksaber.
Y es que esta espada es la razon detras de este articulo, y que fue la confirmación final para mi de que esta serie será todo lo que la trilogía de películas no ha sido. Su primera aparición en el canon de Star Wars fue en la segunda temporada de la serie animada de Star Wars: The Clone Wars, siendo la espada de Tarre Vizsla, el primer mandaloriano en pertenecer a la Orden Jedi mas de 1000 años antes de las películas durante los tiempos de la Antigua República. Estuvo en el templo Jedi hasta que luego fue asaltado por la Casa Vizsla, convirtiéndose posteriormente no sólo en símbolo del verdadero líder de Mandalore, sino en uno de unidad de los mandalorianos. Posteriormente terminó en manos de Pre Vizsla, líder de la Guardia de la Muerte durante las Guerras de los Clones, hasta que fue asesinado por Darth Maul cuando este tomó control del planeta, usandolo en su pelea contra Darth Sidious en la serie animada. Eventualmente, en Star Wars: Rebels, terminó en manos de Sabine Wren, para luego dárselo a Bo-Katan Kryze quien lo usaría para unir a su pueblo en contra del Imperio.
De esta forma, la aparición de esta espada es el mayor y mejor ejemplo que tenemos de cómo el equipo encargado de proteger la continuidad de Star Wars en Lucasfilm hace un excelente trabajo en no solo referenciar distintos elementos de la saga en multitud de medios (películas, serie de TV, libros, comics y videojuegos) sino en hacerlo con un minimo de contradicciones, desarrollando la historia de distintos elementos de Star Wars en varios medios, o al menos haciendo sutiles referencias que solo el verdadero fan reconocerá de inmediato.
Y por esto mismo, al ver este increíble trabajo del equipo de Lucasfilm, de observar que son muy buenos en conservar la coherencia de una saga bastante grande y nada fácil de comprender en su totalidad, que no entiendo como pudieron tener tantos problemas con la trilogía de películas. ¿Acaso el equipo detrás de las películas simplemente ignoró a los de las historias de Lucasfilm? ¿Solo mantienen la coherencia de la saga, mas no tienen poder alguno en cómo se desarrollan las historias de las películas? ¿Faltó liderazgo en Lucasfilm y esto llevó a tener dos directores diferentes con poco o ninguna coordinación en la trilogía? No hay manera de saberlo en este momento.
Lo que si está claro es que The Mandalorian es un buen ejemplo de que, cuando se deja Star Wars en manos de personas que si entienden y aman la historia de la saga, el resultado puede ser, en este caso, una serie de televisión de altísima calidad que tanto el público general como el fan de Star Wars puede disfrutar, y junto al videojuego de Jedi: Fallen Order (que aunque no he podido disfrutar todavia, he visto que ha sido bien recibido por otros fans de la saga) nos da esperanzas de que Lucasfilm sea capaz de crear en el futuro historias de Star Wars mucho mejor pensadas y elaboradas que la actual trilogía de películas.