Hogwarts Legacy: El éxito en la oscuridad de Harry Potter – [Opinión]

Desde que la saga de películas de Harry Potter terminó en 2011 con Las Reliquias de la Muerte Parte 2, esta no ha logrado brillar como en sus días de gloria. La planeada serie de 5 peliculas de Animales Fantásticos parece que se quedara solo en 3, y cada una recaudó menos dinero en taquilla que la anterior, y la obra de teatro de El Legado Maldito, que continúa luego de los libros, al menos en el guión que pude leer, es una basura de historia tan grande, que prefiero fingir que no existe.

Pero parece que finalmente el Wizarding World ha visto algo de luz en Hogwarts Legacy, el nuevo videojuego de la saga, ubicado 100 años antes de los libros, y que con una impresionante recreación de Hogwarts y el mundo mágico, ha logrado captar la atención de los jugadores, volviéndose en todo un éxito, tanto en Steam como en Twitch.

Pero hablar del éxito de este videojuego viene acompañado de los problemas que actualmente tiene Harry Potter, casi todos ligados a su autora, J.K. Rowling, por lo que, para evitar que mi futuro análisis de Hogwarts Legacy se alargue en exceso al hablar de este tema, decidí hacerle un video separado, mencionando los problemas que han empañado el mundo de Harry Potter, desde los menos graves hasta los más polémicos.

J.K. ROWLING COMO AMA Y SEÑORA DE HARRY POTTER

Una de las intenciones detrás de la creación del Wizarding World, fue agrupar todas las historias del mundo de Harry Potter alrededor de una marca, permitiendo crear una especie de universo mágico inspirado en la obra de J.K. Rowling.

Pero tras el éxito inicial de los 7 libros y 8 películas originales, la saga no ha logrado despegar nuevamente, siendo su primer problema, a mi parecer, lo limitado que están sus historias. Universos como el de Star Wars y Marvel funcionan porque, aunque cada una de sus obras tienen que mantenerse dentro de ciertos límites, por cuestiones de continuidad y coherencia, estos tienen margen para contar tramas de géneros distintos.

Solo en Marvel, vemos como hay películas de acción, espionaje, de fantasía, de ciencia ficción, con distintas dosis de drama o comedia, y algo similar sucede en Star Wars. Son universos que permiten contar historias con géneros, intenciones y tramas muy diferentes, que dan diversidad y permiten ir a nuevos lugares.

Esto es difícil que suceda en el mundo de Harry Potter, ya que este tiene mucho más limitado que tipo de historias puede crear, y está muy amarrado a la nostalgia a los libros y películas originales y sin esa diversidad propia de Marvel o Star Wars, simplemente es insostenible crear una fuente constante de libros, series, películas y videojuegos que eviten ser reiterativos y repetitivos al poco tiempo, algo esencial en el éxito a largo plazo de un universo multimedia cohesionado.

Pero más importante aún, para que un universo de este tipo funcione, se necesita un delicado balance entre un liderazgo fuerte, que mantenga la coherencia y continuidad de todo el universo, con un diversidad de equipos que tengan la libertad de contar historias que lleven dicho universo a nuevas direcciones.

Por ejemplo, aunque George Lucas era la máxima autoridad de Star Wars, y era quien decidía que era canon y que no, el permitio que un amplio abanico de autores y equipos crearán contenido para la saga, habiendo muchos libros, cómics, videojuegos y series animadas, que expanden el universo de Star Wars en direcciones jamás vistas en las películas, donde George Lucas tuvo poca o nula participación, y que nos permitió tener algunas de las mejores obras de toda la saga.

Y todo esto sin olvidar que él sabía delegar funciones, teniendo todo un equipo de creativos en Lucasfilm que le ayudaron a crear los alienígenas, planetas, culturas y personajes de la saga, siendo cada película, más un trabajo en equipo bajo el liderazgo de George Lucas, que una mera imposición de el.

Esto no sucede en el mundo de Harry Potter, ya que J.K. Rowling se mantiene como la cabeza principal de todo el Wizarding World, no solo escribiendo los 7 libros originales, de los cuales se inspiraron los guiones de las 8 películas de Harry Potter, sino siendo la escritora de las tres películas de Animales Fantásticos, y quien ideó la trama en que se inspiró el guión de El Legado Maldito.

Personajes, criaturas, escenarios, el mundo en general, es única y exclusivamente obra de J.K. Rowling, que no ha delegado en nadie más la creación de nuevas historias para su mundo mágico, teniendo su nombre una relación directa con esta saga, de una forma que no sucede, por ejemplo, con George Lucas en Star Wars. Probablemente la única excepción, y razón principal de su éxito, es Hogwarts Legacy, donde Avalanche Software y Warner han insistido por todos los medios que J.K. Rowling no colaboró directamente en la creación del juego.

Siendo la visión de J.K. Rowling para su mundo mágico la antítesis de lo que George Lucas hizo con Star Wars, es comprensible el porqué la saga le cuesta encontrar nuevas historias que atraigan al público, que poco a poco ha ido perdiendo el interés en la saga, siendo Hogwarts Legacy una excepción a la regla por su condición de videojuego (¿cuando fue la última vez que tuvimos un buen videojuego de Harry Potter?).

Hogwarts Legacy es la prueba de que, pese a lo que yo mencione, de que este mundo se siente más limitado a la hora de crear un universo tipo Marvel, esto se podría solucionar dando margen a nuevos equipos y autores para crear historias dentro de este mundo, que vayan en direcciones a las que su autora nunca ha ido. Pero mientras J.K. Rowling mantenga un estricto control de todo el universo Harry Potter, este siempre estará limitado a la creatividad de una sola persona, y esta siempre tiene límites.

EL CONSERVADURISMO DE J.K. ROWLING

Otro detalle que llama la atención sobre J.K. Rowling, una vez vemos los libros de Harry Potter en retrospectiva y con ojo crítico, es algo que señalaban en un video del canal Wisecrack, en perfecto inglés, hablando de la ideología política dentro de la saga (les dejo el enlace en la descripción), y es como la autora británica tiene una ideología conservadora que permea en su obra.

El mundo mágico de Harry Potter es uno conservador, atado a seguir antiguas tradiciones, a ser una sociedad elitista, que se considera superior a los “muggles”, y demás criaturas mágicas (como los duendes), que acepta como normal la inequidad existente en que unos tengan magia y otros no, y que es totalmente contraria al cambio del status quo.

Todo el que intenta cambiar a la sociedad mágica, es visto con desconfianza. Esto se disimula con Voldemort, ya que el es presentado como el mal absoluto, que bajo ningún concepto tiene la razón y al cual hay que detener, pero se hace notorio en personajes como Hermione, cuando su idea de darle más derechos a los elfos, es vista como una etapa de la adolescencia en el mejor de los casos, y directamente como una loca en el peor, o en Dobby, que luego de ser un elfo libre, y pedirle a Dumbledore un trabajo con sueldo en Hogwarts, es visto como un elfo excéntrico por la mayoría de personajes.

Los libros de Harry Potter presentan a la sociedad mágica con defectos y contradicciones, pero realmente nunca hacen un intento de que sus personajes no solo las cuestionen, sino que hagan algo por tratar de cambiar a su sociedad.

Todo lo contrario, luego de vencer a Voldemort, la sociedad mágica regresa al cómodo status quo anterior, sin cambios reales que nos haga entender que la sociedad ha avanzado en tratar de resolver sus dilemas, y de hecho, los protagonistas se vuelven parte de ese status quo, con Hermione convirtiéndose en la Ministra de Magia y Harry Potter en un Auror del ministerio en El Legado Maldito

No solo esto, se podría afirmar que la obra de Rowling defiende postulados aristocráticos con sus personajes. El gran protagonista de la historia, Harry Potter, es el héroe destinado por la profecía para vencer al gran mal, uno que además recibe una fortuna como herencia de sus padres, así como una capa de invisibilidad y el mapa del merodeador, siendo mucho de su éxito, gracias a haber nacido como el niño que, mediante la magia de sus padres, pudo vencer a Voldemort.

Mientras, personajes como Hermione, que es la chica más inteligente de su clase, producto de su gran dedicación al estudio, que le ha permitido alcanzar el éxito mediante su propio esfuerzo, es presentada en los primeros libros como una obsesionada del estudio algo molesta para sus compañeros.

Incluso podríamos afirmar que la obra de J.K. Rowling defiende una idea que en Venezuela es conocida como “Cesarismo Democratico”, propuesto a inicios del siglo XX por el intelectual venezolano Laureano Vallenilla Lanz que, en resumen, defiende la idea de que un líder fuerte, carismático y bien preparado tenga un amplio poder centralizado, pero permitiendo cierto nivel de participación ciudadana en la toma de decisiones políticas, siendo la base para los gobiernos demasiado autoritarios para ser democráticos, pero demasiado liberales para ser dictaduras hechas y derechas, que hubo en Venezuela entre las décadas de los 30 y 40.

En este sentido, el problema de la sociedad mágica no es que Voldemort quiera el poder absoluto, o que el sistema con que funciona el Ministerio de Magia, y la sociedad mágica en general, no funcione, sino que quienes lo lideran son ineptos, y que darle el poder a personas como Dumbledore, Hermione o Harry Potter, que tienen buenas intenciones, hará que las cosas se solucionen.

Hasta este punto, nada de esto implica que J.K. Rowling este haciendo algo malo, que sus obras pretendan inculcar una ideología, o que toda la trama este centrada en postulados conservadores.

Lo que sucede es que, en una era donde las generaciones más jóvenes cuestionan las antiguas tradiciones, exigen más derechos y representación para las minorías históricamente discriminadas, y se aspira a cambios en la sociedad que nos den una mejor calidad de vida, la filosofía de la que aparentemente partió J.K. Rowling para crear el mundo mágico alrededor de la historia de Harry Potter, conservadora, contraria a los cambios y que prefiere preservar el status quo, es una que se siente muy anticuada para lo que muchos consideran necesita la sociedad actual, y que hace que los libros de Harry Potter envejezcan mal en ciertos aspectos clave de su trama.

J.K. ROWLING Y LAS POLÉMICAS

Lo que sí es definitivamente malo, y lo que realmente empaña, no solo la saga de Harry Potter, sino el legado completo de J.K. Rowling, son sus ideas contra la comunidad transexual.

Y es que, considerando que ella es una británica de más de 57 años, que se intuye que es conservadora y contraria a los cambios abruptos, se entiende que tenga sus dudas sobre la comunidad transexual, ya que en muchos paises, la sociedad en general no ha alcanzado un consenso sobre los derechos de la comunidad transexual, al mismo grado con que actualmente nadie (que aspire a llegar al poder democraticamente) en ninguna nacion occidental, cuestionaria que las mujeres tienen derecho al voto, o las personas de color derecho a tener derechos.

Pero una cosa es tener un debate en temas puntuales sobre cómo proteger los derechos y deberes de los transexuales en la sociedad, por ejemplo, en cuestiones como el integrarlos en deportes olímpicos que garanticen su acceso, sin que las mujeres sientan que están ante una competencia injusta, o el debate de si enviar a una carcel de mujeres o no a un transexual acusado de cometer un delito, y otra es el enfoque que tiene J.K. Rowling, que se puede resumir en la siguiente frase: darle derechos a los transexuales daña los derechos de las mujeres.

Bajo su enfoque del feminismo, dar y proteger derechos a los transexuales perjudica la causa feminista, por lo que para proteger los derechos de las mujeres, hay que marcar una clara separacion con los transexuales, negandose a cualquier politica que implique darles beneficios o accesos que consideran propios de las mujeres.

Quienes piensan asi son comúnmente denominados TERF, que es el acronimo en ingles de trans-exclusionary radical feminist, o feminista radical trans-excluyente, y aunque normalmente es usado como un insulto, J.K. Rowling se ha definido a sí misma de esta forma en su cuenta en Twitter.

De hecho, esta red social se ha convertido en el principal medio de J.K. Rowling para transmitir sus ideas transfobicas, siendo la mayoría de sus mensajes de dos tipos: una defensa a los derechos de las mujeres de acuerdo a sus ideales, o críticas constantes a la comunidad transexual y a todo el que les apoye. Lo primero por sí solo no es malo, pero se ve perjudicado por su idea de que proteger a las mujeres implica atacar a los transexuales.

Y lejos de buscar fomentar alguna clase de sano debate sobre el tema, J.K. Rowling se ha encerrado en sus posturas, no solo criticando a figuras públicas que sí defiende a los transexuales, sino directamente burlándose de los usuarios de Twitter que tratan de argumentar con ella porque no apoyan sus ideas.

Incluso se ha dedicado a escribir novelas que giran en torno a su visión de esta polémica. El primero, Troubled Blood de 2020, trata de un detective que persigue a un hombre que se disfraza de mujer para asesinar a mujeres, y el segundo, The Ink Black Heart de 2022, es de un youtuber cuyo trabajo es considerado racista y transfóbico, y que recibe amenazas de muerte hasta que finalmente es asesinado. No hay que hacer un análisis muy profundo para ver que el primer libro es la novelización de sus temores, y el segundo, el cómo se percibe a sí misma en medio de esta polémica.

Pero lo peor es que, haciendo uso de su fama y reputación, J.K. Rowling le ha dado voz y apoyo directo a personas extremistas que son incluso peores en sus ataques a la comunidad transexual, o que pertenecen a movimientos ultraconservadores y de la extrema derecha que, aunque tecnicamente tienen postulados que entran en conflicto con algunas ideas del feminismo, comparten su odio a la comunidad transexual.

Para más información, les recomiendo que vean el video que hizo Quetzal (este si es en español) donde habla largo y tendido de esta polémica, desde un punto de vista mejor informado que el mio.

En cualquier caso, la polémica de J.K. Rowling no es tanto por tener dudas hacia aspectos concretos de la comunidad transexual, que son normales que surjan en una era donde se esta buscando garantizar los derechos de comunidades historicamente discriminadas, ni su defensa ferviente del feminismo, que por si sola se puede ver como algo positivo, sino su idea de que para defender a las mujeres, debe atacar a los transexuales, su negativa a no escuchar o debatir a quien no comparta sus ideas, y su apoyo a personas transfobicas con postulados iguales o peores.

CONCLUSIÓN

El universo de Harry Potter es uno que, desde el inicio, ha tenido algunos problemas, ya que la visión que J.K. Rowling tiene del mundo, sus ideales políticos, y su deseo de tener un control total de las obras que conforman su universo mágico, es uno que, pese al éxito inicial de los 7 primeros libros, ha limitado el alcance de este universo que simplemente, no ha logrado despegar fuera de la nostalgia hacia Harry Potter.

Si la cosa se quedará aquí, no habría problemas, ya que no es pecado crear una historia de tintes conservadores, en una era donde el progresismo domina el discurso de muchos sectores, menos si la historia de Harry Potter genuinamente tiene valores positivos de heroísmo, valor, amistad y aceptación.

Lo que sí es malo es cuando todo esto degenera en la equivocada visión de J.K. Rowling, de creer que la defensa de los derechos de las mujeres equivale a atacar constantemente a los transexuales, que esta “guerra” requiere apoyar a transfobicos, aun si estos defienden postulados contrarios al feminismo, y tienen toda la pinta de que, de tener el poder de un país, serían de todo menos democráticos.

J.K. Rowling no sólo destrozó la imagen que teníamos de ella y la saga, al actuar de una forma que contradice todo lo que aparentemente ella defendía en sus libros de Harry Potter, sino que pretende que aceptemos como normal que se criminalice a todo un sector de la población, en un acto que no solo es inmoral, sino que me hace preguntar: hoy son los transexuales, ¿quien sigue mañana?

Mi siguiente video sera un análisis de Hogwarts Legacy, que actualmente sigo jugando en mi PlayStation 5, y en el cual me centraré exclusivamente en que tan bien adapta el mundo de Harry Potter, por lo que no les diré que boicoteen este juego, eso es algo que depende de cada uno. Pero siento que, con el lanzamiento de este juego, es una buena oportunidad para reflexionar sobre las ideas de su autora, para así criticar y denunciar su visión del mundo, donde los derechos de uno pasan por negarle los derechos a otros.

Nelson Muñoz

Licenciado de Estudios Liberales de la Universidad Metropolitana de Venezuela. Me especializo en blogging, SEO y Analítica Web, además de ser un gran fanático de los videojuegos, el cine, el anime y los cómics.

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