¿Por qué sube de precio PlayStation 5? [Opinión]

¿Por qué sube de precio PlayStation 5? [Opinión]
El siguiente artículo es el guion del video que puedes ver aquí.

En un movimiento muy inusual, Sony anunció esta semana un aumento en el precio de PlayStation 5, que afectará a mercados como Europa, Japón y América Latina, siendo esto algo muy inusual en el sector tecnológico, acostumbrado a que, con el paso del tiempo, los costos de fabricación se abaratan, y los precios de venta disminuyen.

Ante el malestar que ha generado entre muchos usuarios, que protestan diciendo que esto es inaceptable, quise hacer este video explicando por qué considero que Sony tomó esta decisión, que me parece razonable dado el contexto actual que vive el mundo, y la situación de Sony en particular. Y si, sé que a muchos les va a molestar que entienda la decisión de la compañía.

Recordemos, en primer lugar, que la industria tecnológica todavía no ha superado la escasez de componentes que generó la pandemia en el último par de años, y que sigue golpeando a Sony en mercados como el de Estados Unidos o Europa, donde sigue siendo difícil conseguir una PlayStation 5.

A esto se debe sumar que ahora el mundo sufre una inflación muy alta, prácticamente del doble o más al promedio de años previos, y que además viene acompañado de un auge en el precio de los combustibles, de la energía, del transporte, y una parálisis parcial de China, a causa de las estrictas medidas del régimen para contener el COVID. Todo esto tiene un impacto en la fabricación de cualquier aparato tecnológico, habiendo empresas como Apple, que ya han subido el precio de sus MacBook.

Y no olvidemos que el escenario mundial es inestable actualmente, con la guerra en Ucrania llevando al alza el precio del gas en Europa (y por lo tanto el costo de la energía en esa región) o las amenazas de China a Taiwan, donde están las principales fábricas de chips del mundo (solo TSMC domina el 53% de la fabricación mundial de chips), por lo que una guerra en esa isla tendría efectos catastróficos en todo el planeta.

Ante este escenario, de los tres fabricantes de consolas, Sony se presenta como el factor más débil.

No nos confundamos: aunque PlayStation sea de las que más ganancias hace en el sector de videojuegos, superando a Xbox en ingresos, la realidad es que Microsoft es una de las empresas más poderosas del mundo, generando, de acuerdo a Forbes, casi 71.2 mil millones de dólares en ingresos, frente a Sony, que generó 8 mil millones de dólares.

Para Microsoft, su división de videojuegos no representa ni el 10% de sus ingresos totales, usando las enormes ganancias de la compañía para absorber los costos y pérdidas de Xbox (como los aros de la muerte de 360 o toda la generación de One), financiar planes a largo plazo (como Game Pass) o, en este caso, absorber el auge en los precios de fabricación por mucho más tiempo que Sony.

Nintendo, por su lado, tiene la ventaja de que su Switch es mucho más barata de fabricar en comparación a una PlayStation 5, y que sus juegos exclusivos, que venden a precio completo, se venden muy bien, por lo que también tienen margen de maniobra con los precios, más considerando que Switch ya tiene tiempo en el mercado, y no se vende a pérdida como generalmente hace Sony al inicio de cada generación de consolas.

Sony, en cambio, aunque sigue siendo una gran corporación, no solo es más pequeña, en términos relativos, que Microsoft (teniendo un valor de mercado de casi 109 mil millones de dólares frente a los más de 2 billones de Microsoft) sino que su división de juegos y redes, donde está PlayStation, representa 27 por ciento de los ingresos de la compañía. En pocas palabras, Microsoft sostiene a Xbox, mientras que PlayStation sostiene a Sony.

A causa de esto, el margen de maniobra que tiene Sony para absorber los precios es mucho menor al que tiene Microsoft, que puede alargar durante mucho más tiempo esta decisión con su enorme billetera, o aumentar los precios de servicios como Xbox Live o Game Pass en caso de ser necesario. Pero no se equivoquen, si los actuales problemas en el mundo continúan, tarde o temprano, Microsoft y Nintendo se verán forzados a aumentar sus precios, no importanto si las empresas ya han asegurado lo contrario (no sería la primera vez que una empresa hace lo que prometió no hacer).

Lo que sí podemos considerar como un insulto es el enfoque que tuvo Sony, que claramente busca compensar el auge en los costos de fabricación, aumentando el precio en todo el mundo menos en los Estados Unidos, el mayor mercado de videojuegos del planeta. Aunque financieramente se entiende esta decisión, es comprensible porque los usuarios de América Latina, Europa y Japón, entre otros, se enfurecen, ya que esto se percibirá como que ellos pagan el costo para mantener el precio igual solo en Estados Unidos, que seguramente también verá incrementado el precio tarde o temprano.

En cualquier caso, esto es solo un análisis rápido que hago para explicar el porqué de esta decisión, porque considero que es más compleja que solo decir “porque quieren más dinero” que abunda en las redes sociales, y para advertir que, ante el panorama actual del mundo, no debemos dar por sentado que la idea de “los precios van a bajar” en tecnología (o en cualquier cosa en general) sea algo tan seguro como lo ha sido hasta ahora.